Descubren un nuevo mecanismo por el que la obesidad muestra resistencia a la insulina.

Un estudio de la revista "PNAS" ha demostrado uno de los dispositivos por  los que la obesidad articula el metabolismo de la glucosa y de los lípidos en ratones. Esto se hace a través de cambios en el contenido de microRNAs (pequeñas moléculas con capacidad para regular la expresión de determinados genes) de los exosomas, vesículas que segregan todas las células y que están en la sangre. Estos cambios en el modelo de los microRNAs provocan intolerancia a la glucosa y resistencia a la insulina. El estudio desvela un mecanismo patológico poco estudiado hasta ahora y proporciona una nueva diana terapéutica para el tratamiento del síndrome metabólico.

La obesidad suele estar relacionada con enfermedades metabólicas. La diabetes de tipo 2 es una de las enfermedades metabólicas más común en el mundo, se estima que en 2050 afectará a un tercio de la población. Este tipo de diabetes está asociado al sobrepeso y sedentarismo, siendo la obesidad una de las causas principales de resistencia a la insulina.

Aparte de la anterior función de los microRNAs, también puede secretar casi todos los tipos de células del organismo dentro de vesículas llamadas exosomas 8vesículas que secretan los tejidos y que contienen proteínas, lípidos o moléculas de RNA en el caso del síndorme metabólico) . Los cambios en el perfil de los microRNAs circulantes en la sangre se asocian a varias enfermedades, entre ellas las metabólicas.. Estas moléculas se pueden utilizar como biomarcadores para mejorar el diagnóstico de las enfermedades y monitorizar la respuesta a los tratamientos.

Para el estudio, los investigadores han estudiado el papel de los microRNA contenidos dentro de los exosomas, para ello han usado un ratón diabético que simula este síndrome. A través de una dieta rica en grasas, los animales se hacen intolerantes a la glucosa.

Una vez que analizaron estas pruebas en los ratones, obtuvieron un panel mediante un análisis bioinformático. Los resultados demuestran que la obesidad cambia el perfil de microRNAs en los exosomas del plasma en ratones. Lo más importante es que si se estudia a ratones sanos con los exosomas, asilados de ratones obesos, se provoca intolerancia a a la glucosa y resistencia a la insulina.
Los investigadores lograron reproducir en el laboratorio el patrón de microRNAs unido a la obesidad, y vieron que la transferencia a ratones sanos también les provocaba el mismo síndrome metabólico.

Esto solo es una parte de lo que queda por investigar y averiguar, en un futuro se espera conseguir bloquear estas moléculas para que no aparezca la enfermedad, explicaba Anna Novials.