domingo, 30 de abril de 2017

Identifican nuevos microorganismos con propiedades terapéuticas

Los manantiales termales ourensanos podrían ampliar en el futuro las posibilidades terapéuticas de sus aguas mineromedicinales si se confirman las conclusiones de un estudio realizado por investigadores de la Universidade de A Coruña. Este equipo analizó las aguas de varios balnearios y estaciones termales de Galicia, entre ellos el de As Burgas y Termas de Outariz, donde identificaron por primera vez diatomeas autóctonas. Los resultados del estudio, que se han publicado en una revista científica especializada en este tipo de microorganismos, permiten abundar en otras aplicaciones de estas aguas. Así lo asegura la directora del estudio, la catedrática de Hidroloxía Médica, Rosa Mejide Faílde. «Algunos de estos manantiales calientes son considerados por la alta temperatura del agua y en otros casos son aguas sulfurosas, donde fueron diatomeas características de la especie. Estos resultados indican un enorme potencial del estudio de las comunidades biológicas que son propias aguas manaciais de Galicia, además de sus posibles aplicaciones terapéuticas en forma de lodos, los llamados peloides». En Galicia existen poco estudios sobre los manatiales y la mayoría se centran en las características fisioquímicas de las aguas. «Comunidades biológicas que el huésped están muy poco estudiado y caracterizado; en particular, la vida microscópica constituye un elemento esencial para sus posibles aplicaciones», señala la experta que matiza que un componente fundamental de los microorganismos de las aguas o de las superficies por las que discurren son las algas microscópicas que en ocasiones se manifiestan como un verdín sobre las piedras y otras superficies. Dentro de esas comunidades de microorganismos existe un grupo que es de los más comunes de fitoplancton: las diatomeas. «Las comunidades de diatomeas son una herramienta que se utiliza actualmente para el monitoreo de las condiciones ambientales, la calidad del agua, en el estudio del cambio climático o para la producción de biodiesel», recuerda Rosa Megide.

No hay comentarios: